Carta de Charlot a Maggie

Hola chicos, es un placer para mi poder compartir esta carta de amor, que Charlot desde la ciudad de escribe a su mujer que se encuentra en el campo, lugar de origen de los dos. Debemos tener presente que estamos hablando de la revolución industrial por lo que debemos transportarnos al siglo XIX. Mas que un trabajo escolar me gustaría que todo aquel que lea esta carta se imagine la escena, el lugar los sentimientos de Charlot hacia Maggie (su mujer). Espero que les guste y lo disfruten

Querida Maggie:

Estos últimos días, he pensado en como contarte esto, como explicarte la vida tan diferente que las personas llevan en esta ciudad. Debo comentar que trabajar en la industria, lleva más esfuerzo de lo que me pensaba, pero gracias a un éxodo rural masivo a la ciudad todo funciona cada vez mejor. Aunque de verdad me gusta que cada obrero respete lo que aquí llaman taylorismo, buena manera de organizarse, cada día funciona mejor el maquinismo.

El día que llegué, realizamos un sindicato obrero, conocí a muchas personas, entre ellos muchos obreros como yo y algunos jornaleros del campo con los que no he compartido mucho, personas que vienen con energía y disfrutan del proceso, yo me tomo todo con calma, vivo un día a la vez, no puedo negar que te echo de menos, echo de menos en despertar en el silencio y el respirar aire puro.

La vida se trata de aprovechar al máximo las oportunidades presentadas, hay personas que solo piensan en organizar una huelga prohibida desde la primera semana, esta es la manifestación de trabajadores a superiores. No olvidare de contarte sobre los burgueses, personas arrogantes a mi parecer, nada que ver con un corazón humilde, siento que te miran con desprecio y lastima. Sabiendo ellos que trabajamos para su productividad y su beneficio también, algunos exigen más de lo que simplemente podemos dar, sin embargo, forma parte de cada personalidad que por esta industria pasa

Las ciudades han sabido aprovechar su potencial para estas grandes industrias, yo por el momento, no comprendo cómo va todo, de que se tratan las demás industrias y con qué fin trabajan, pero cada empresario sabrá porque lo hace. Maggie aquí todos tienen un oficio, por tomar un ejemplo, existen personas a las que se les llama capataz, que para ser honesto me reí al escuchar ese nombre por primera vez. Se le da ese nombre a aquel encargado de vigilar o dirigir un puesto de trabajo. Que no te sorprenda mi conocimiento, todo lo pregunto y aquí entre nosotros, me ha costado saber todo lo que hasta el momento te he contado.

En este lugar contamos con electricidad, aquello que de niños aprendimos, pero no veíamos. Debo comentarte, que no ha sido fácil acostumbrarme a que todo empiece funcionar de la manera correcta, con esto me refiero a que ha mejorado de forma espectacular el transporte, los canales, puertos, ferrocarril, etcétera. La tecnología se vuelve cada vez más cara lo que quiere decir que las industrias son cada vez mayores, para este momento los adelantos tecnológicos tienen una traducción industrial relativamente rápida.  

Ya verás Maggie que voy a avanzar, cada día hago mi mejor esfuerzo. No siempre esto me resulta fácil, pues mis superiores siempre están pendientes de mí, de lo que hago bien y lo que no hago tan bien, si hago algo mal es de esperar que el capataz no estará muy contento y eso no me viene bien.

Los burgueses como te venia contando toman las riendas del poder, y para aumentar la productividad, sometió a condiciones de trabajo abusivas, en mi caso te puedo hablar de las jornadas larguísimas de trabajo en las que ni los descansos ni las vacaciones son reguladas, no te lo digo con el fin de preocuparte, quiero más bien que sepas la razón por las que no sabes de mi durante mucho tiempo. Pero querida he aprendido que todo comienzo ha de ser pesado

Aquí encontramos mucho el capitalismo y les debe ir bien porque todos los que forman parte de él tienen un lindo automóvil y muchos recursos para mantener a su familia, espero algún día ser yo parte de este sistema, poder complacerte a ti en lo que tu más deseas, quiero que conozcas lo bueno, cosa que quizá no será tan fácil, pues al venir de un campo hay muchas cosas nuevas jamás vistas que encontraras solo en la ciudad, pero son historias que nunca me aburriré de contar.

Todos como ya he dicho tienen su oficio, he encontrado personas que no viven de una industria, más bien protegen a todo aquel que a ella va, los policías, guardianes que supervisan y cuidan de la ciudad, personas que en el fondo tienen sentimientos y buenas intenciones, aunque de primera impresión no parezca.

Casi me olvido de comentarte sobre las revoluciones, un tema bastante hablado los últimos días. Como por ejemplo la revolución agrícola mejora las técnicas de cultivo y no se necesita tanta mano de obra y se producen cada vez más alimento, todavía no lo entiendo del todo, pero me parece alucinante y que increíble han sido todas las transformaciones industriales, que se basan en un nivel mucho más alto de tecnología como lo es la máquina de vapor, ya que se logró pasar de la vieja forja de carbón de leña a la fundición de hierro con carbón mineral.   

Algunos días he pensado que el anarquismo forma parte del común vivir de algunas personas, comportamientos que se oponen a cualquier forma de gobierno y este defiende una libertad propia. Eso me ha dado razones para pensar que no todos somos tan buenos y mucho menos iguales y que cada día hay algo distinto para contar.

Algún día vivirás esto, sé que no estarás de acuerdo con muchas cosas. Pero si queremos que nos tomen en cuenta y ser parte del futuro la ciudad me parece el lugar ideal.

Ha sido un completo placer y honor para mí poder contarte un poco, solo un poco, de lo que a diario veo. Sé que se me escaparon muchas cosas, pero tardaría toda una vida el contarte mi día a día, trate de expresar lo más relevante en un espacio corto. Mis saludos a la gente que por mí se preocupan y un cariño grande te envío a ti, mi queridísima Maggie, buscare el tiempo necesario para saber de ti. Mis más grandes deseos.

Con amor y dedicación

Charlot